La ecografia transvaginal es un estudio de la pelvis que tiene el fin de examinar los genitales de la mujer (vagina, útero, cuello de útero) pero (Como su nombre lo indica) en lugar de realizarse superficialmente, se lleva a cabo mediante una sonda colocada a través de la vagina.
Para realizar el ginecólogo te pedirá que te tumbes sobre la camilla y apoyes las piernas sobre los estribos. Para introducir más fácilmente la sonda, colocará un preservativo sobre el aparato y aplicará un gel. Cuanto más cómoda te encuentres menos dolor sentirás, ya que se introducirá en tu cuerpo de forma más natural. Trata de relajarte y no ponerte nerviosa ya que se trata de un examen muy sencillo.
Es una técnica de imagen que utiliza frecuencias altas de ultrasonido, imperceptibles al oído humano. Se coloca un gel hidrosoluble sobre la piel de la mama. Un dispositivo manual (transductor) dirige las ondas sónicas hacia el tejido mamario. El transductor se pasa sobre la piel de la mama para crear una imagen que se puede ver en una pantalla. La ecografía puede ayudar a mostrar masas o tumores no cancerosos como:
Quistes: sacos llenos de líquido.
Fibroadenomas: tumores sólidos benignos.
Lipomas: protuberancias grasas no cancerosas que se pueden presentar en cualquier parte del cuerpo, incluyendo las mamas.
Los cánceres de mama también se pueden observar con una ecografía.